20.000 especies de abejas

 No el Ser abstracto de los filósofos, sino el Ser de quién soy (en la infancia) y de cómo me lo aceptan los demás, comenzando por mi familia. No la identidad como algo inamovible y fuera de ahí la tara, y la anomalía, sino cómo adaptar las circunstancias que me rodean a mi Ser. Yo soy yo y mi circunstancia, y si no la salvo a ella no me salvo yo, dijo el filósofo. Pero, ¿nos salvamos o nos salvan? ¿Es la incomprensión ajena la que nos condena? Una delicada reflexión sobre un tema tan complejo gracias a Estibaliz Urresola.

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