De memoria
Al leer que las cosas no son como fueron sino como las recordamos, sé que todo es una reconstrucción, ahora que voy olvidando las cosas, y me veo obligado a preguntar sobre fechas y lugares, acerca de cómo sucedieron los hechos. A veces la respuesta es directa, un flechazo, pero otras no, y la respuesta veo que atiende también a una reconstrucción del pasado, como levantar un muro con unos cuantos ladrillos y sin tener conocimientos claros de albañilería, y por eso sé que si viene el lobo feroz, a nada que sople, se irá el muro abajo, se irán todos los recuerdos prestados abajo, toda mi desfalleciente memoria, y sé también, porque esto es una certeza y no un recuerdo, que si me buscan bajo tantos cascotes no me encontrarán.