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La belleza

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    En su ensayo La belleza , Roger Scruton , el autor, parte de seis obviedades: La belleza nos da placer. Una cosa puede ser más bella que otra. La belleza siempre es un motivo para prestar atención a lo que la posee. La belleza es el objeto del juicio: el juicio del gusto. El juicio del gusto se refiere a algo bello, y no al estado de ánimo de quien lo formula. Cuando describo a un objeto como bello, lo que describo es el objeto, no me describo a mí. No obstante, los juicios de belleza sólo pueden ser personales. No me pueden convencer sin que yo mismo formule mi propio juicio, ni tampoco puedo convertirme en experto en belleza mediante el simple estudio de lo que otros han dicho sobre los objetos bellos, sin experimentar y juzgar por mi cuenta. A lo largo del ensayo Scruton no definirá la belleza, pero si mentará a otros que lo han intentado, como Hutcheston , para quien la belleza era la unidad en la variedad. O Kant (filósofo muy presente en el ensayo), para quien lo bello es lo

No-cosas

  Leo no-cosas de Byung - Chul Han y pienso en los años de mi mocedad, cuando trajinaba con el walkman, el discman, el tocadiscos, los casetes, las cintas de vídeo, los vinilos, los libros. Observaba las portadas, copiaba las letras, grababa canciones de la radio, registraba los episodios de Doctor en Alaska o de Aquellos maravillosos años en videocasetes. Llamaba desde las cabinas para conversar. No existían los audios, que fragmentan y difieren la “conversación” y que deja de serlo como tal. Aquellos objetos de mi adolescencia han sido desplazados o se han vuelto innecesarios con el streaming , con aplicaciones como spotify , con los libros electrónicos. Describe muy bien todo esto Byung - Chul Han en su ensayo, cómo las cosas se convierten en no-cosas devoradas por lo virtual, porque la digitalización desmaterializa y descorporeiza el mundo. Todos aquellos objetos eran un contenedor de nuestra experiencia y nuestros recuerdos. Recuerdo cuándo compré los vinilos, lo que me deparó s