Ir al contenido principal

Entradas

Mostrando las entradas etiquetadas como cine francés

Misericordia

  Todo en la película Misericordia resulta extraño, incluso inverosímil y esa es precisamente su mayor virtud. Historias de crímenes hemos visto muchas. No es tan habitual que los acontecimientos sigan el curso que aquí se ofrece. Que el deseo se explicite de esta manera, que la muerte se asuma así por parte de un cura, que la moral sea tan orillada en pos de unas acciones que vemos con asombro, si no con estupefacción. En esa transgresión, incluso provocación, es donde la película crece en cada minuto, hasta su resolución final. No busquemos realismo. Hagamos volar la imaginación. Abrámonos. Sea.

El Mohicano

  Joseph es un cabrero corso que siente el aliento de la mafia en la nuca instándolo a vender el terreno donde tiene la granja. Una parcela frente al mar, muy golosa para la mafia local, que quiere construir en esos terrenos. Joseph no acepta los 300000 euros que le ofrecen y dice no. Un rifirrafe con un mafioso local se salda con la muerte de este último. A partir de entonces Joseph convierte su día a día en una lucha por la supervivencia. La sobrina de Joseph, muy activa en las redes sociales, viraliza la huida de su tío y su inesperada gesta: el desplante al poderoso. El rostro de Joseph pasará a poblar las paredes de los edificios, los troncos de los árboles, o incluso servirá para la letra de una canción protesta. El pueblo apreciará el gesto de Joseph. Pero no olvidemos que si la cosa sale mal, quien pagará los platos rotos con su vida será Joseph. El resto será solo testigo de una situación injusta. Una de tantas.

Los hambrientos (Robin Aubert)

  El género del terror centrado en los zombis busca siempre reinventarse, o si se quiere, ir dando pasos al frente. En Los hambrientos , a los zombis se les reconocerá por los baladros exhalados al éter, anunciadores de su presencia. De esta manera, los no infectados son alertados. Además, vemos cómo los zombis parecen tener algo de inteligencia, aunque nunca sabremos qué sucede dentro de un zombi, ni de qué pasta están hechos. Los veremos erigir grandes construcciones con objetos: una suerte de Torre de Babel que no parece ser aquí metáfora de desafío alguno. Por lo demás, todo resulta trillado.

Cuando cae el otoño

  Cuando cae el otoño , de François Ozón , es un buen ejemplo de cómo hacer una película interesante con muy pocos mimbres. La conflictiva relación entre una mujer y su madre, una muerte sospechosa, un pasado que regresa sin dar zarpazos, el incólume cariño de una abuela hacia su nieto, la posibilidad de un futuro y asimismo de corregir destinos aciagos, aun teniendo que hacer la vista gorda. Cae el otoño y las hojas. Se apaga la naturaleza, también la humana. Sobre el lecho de hojas yacerá también ella, en un apagarse envidiable por natural, incruento y pacífico. Fluye la vida.