El crimen perfecto como arte, en un único escenario, rodada la película en color, en un plano secuencia, en 1948, tres años después de finalizar la Segunda Guerra Mundial. Un joven maquiavélico decide consumar un crimen junto a un amigo, y recrearse en su acción. Para ello da una fiesta e invita a la novia y a los padres del asesinado (con una soga). El misterio pasa por ver si los descubrirán o no. El soporte teórico es la necesidad de librarse de los seres inferiores. Comparece Así habló Zaratrusta de Nietzsche, el superhombre, Hitler. El mal y su banalidad.
Hoy nos movemos por una de las zonas más bonitas de la Rioja: el Camero Viejo. Partimos del pueblo de Hornillos de Cameros. No vamos siguiendo las huellas de dinosaurio (en el yacimiento de La Pellejera se han descubierto 730 icnitas). Aún no son las diez de la mañana y ya brilla el sol con fuerza. Hornillos es un municipio con doce vecinos empadronados. Nosotros somos más de dos docenas y seis coches que aparcamos próximos al exiguo frontón. Hay quien antes de comenzar la travesía las ve venir en movimiento, en el vaivén de los columpios , frente a la Ermita de San Adrián. Ya en ruta no tardaremos mucho en ver los restos de la iglesia de Santa María de la Blanca, en tomar algunas fotos frente al hastial, en Torremuña . Pueblo abandonado que parece haber cobrado nueva vida, y que ahora es noticia a cuenta de una obra de teatro sobre la sustracción de las tablillas del retablo , en la referida iglesia, cinco décadas atrás. Tras avanzar por una pista que deja un hayedo a nuestra d...