Un popolo di poeti, di artisti, di eroi, di santi, di pensatori, di scienziati, di navigatori, di trasmigratori. Palabras que el viajero lee en el Palazzo della Civiltà Italiana en el Eur, el conocido como el Colíseo cuadrado. Sorprende ver ahí a los poetas, artistas, pensadores, científicos, migrantes, porque estas son las palabras que el dictador Mussolini vertió en 1935 y que sus acciones desdicieron. Un edificio, ejemplo del modernismo racionalista fascista que domina hoy, inerte en el horizonte, próximo a la Basílica de San Pedro y San Pablo, cuyo interior permanecía vacío a mediodía. Nada que ver con el Panteón.