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Edad de hombre

Para Michel Leiris la edad de hombre es a los treinta. Acaso la experiencia ya saturada y la necesidad de explicarse a sí mismo cómo es él, cuál su identidad, qué es aquello que lo conforma y desespera. La muerte y el suicidio son para él la materia prima con la que dar forma a sus temores, miedos y desvelos, la ganga en los sueños narrados, la cobardía un traje de luces apagado. La escritura el asta de un toro. A portagayola, a corazón abierto, escribe para desvivirse, para extraerse. Así excreta una confesión. Desinhibido. No morirá en la plaza. Lo hará a los noventa, triplicada su edad de hombre. Días sumados y asumidos.



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